domingo, 5 de julio de 2009

Amazonas: HELP! (Segunda Parte)


El norte de Brasil – donde se encuentra la mayor parte de la selva amazónica – es una vasta reserva de minerales (como la bauxita), cuya explotación (que empezó a realizarse hace cuatro años) ha dado empleo a cientos de miles de personas. Los proyectos industriales de varias empresas nacionales y extranjeras han tenido efecto, tal vez irreversibles, en el norte y nordeste brasileño.

La explotación de la región se impone tanto del punto de vista económico como el de las necesidades educativas, laborales y de salud de los lugareños. Ahora las grandes transnacionales dejan de ser los únicos predadores del Amazonas; la pobreza extrema y la falta de alternativas económicas también son enemigos de esta floresta. Para los brasileños del norte la moto sierra es equivalente al pan que van a llevar a la casa para sus familias.

La historia de esta región pudiera ser diferente. Trillones de dólares están ocultos bajo el manto fértil del Amazonas, esperando proyectos que combinen la fuerza del capital motriz con la visión de “tratamiento especial” que requiere esta zona, dada su importancia mundial. Hoy la selva amazónica es una bendición natural transformada en una fábrica de problemas, entre ellos: tala ilegal (en 2007 aumentó un 15%); falta de control, lo que transforma al territorio en tierra de nadie; actividad pecuaria desmedida.



Reportaje de televisora brasileña sobre el problema en Amazonas. Está en portugués.

La idiosincrasia latinoamericana nos ha enseñado a echare la culpa a terceros de los errores que nosotros mismos cometemos, y Brasil no escapa de ello. La culpa de que el Amazonas esté tan devastada como hoy es de los mineros, taladores y agricultores; la falta no es de los gringos. Cada vez que la destrucción de la selva crece y se culpa al gobierno de Brasil por tales actos, ellos responden inescrupulosamente “el Amazonas es nuestro”. Ciertamente más del 60% del bosque amazónico se encuentra en Brasil, pero eso no quiere decir que ellos sean los dueños y que pueden hacer lo que les venga en gana.

El Amazonas no está solamente sobre ataque alienígena. Empresas brasileñas de alimento como Pão de Açúcar y Perdigão son igualmente responsables pues estos frigoríficos comercializan animales criados en zonas deforestadas ilegalmente. ¿Cómo decirle al mayor consumidor/exportador de carne del mundo que deje esa práctica? La respuesta a esta interrogantes es un cambio de paradigma dirigido al desarrollo pero también a la conservación.



Video de Greenpeace sobre la quema y tala en Amazonas. Está en inglés.

Si se subsidiara la cosecha de frutos y de semillas oleaginosas – en el Amazonas – y los locales obtuvieran ingresos por esos trabajos de recolección, el interés por conservar crecería. Además se empezaría a desenvolver un mercado interno favorable tanto para la naturaleza como para los habitantes del norte y nordeste brasileño.
Si Brasil y el resto de los países (como Venezuela y Colombia) que comparten la floresta amazónica copiaran los modelos de desarrollo de países como Dinamarca, Noruega o los Países Bajos, fuera un avance tremendo en materia de conservación y economía. No obstante lo conflictos de intereses entre las políticas ambientales y el gobierno retrasan el compromiso hacia la reserva natural más grande del mundo.



Fuentes: http://www.exame.com.br/, http://www1.folha.uol.com.br/folha/brasil/ult96u57660.shtml, http://www.amazon-rainforest.org/destruction.html.

viernes, 3 de julio de 2009

Amazonas: HELP! (Primera parte)




Dicen que el calentamiento global es un peligro para el Planeta Tierra. Pero qué tal si decimos que el único culpable de que exista el calentamiento global es el ser humano. O podemos decir también que somos el único peligro para el Planeta. Véanlo como quieran. Ni el oso polar o el mono araña hacen tanto daño como nosotros, lo peor del caso es que se supone que somos seres racionales y no estamos usando esa razón a favor de todos, sino en detrimento del mundo entero. Entonces ¿quiénes son más animales?


Tengo tres incentivos para escribir sobre este tema que, independientemente de donde seamos o cuál idioma hablemos, nos concierne a todos por igual: soy parte del grupo que ha contribuido a que la Tierra continúe enferma (creo que todos lo somos hasta cierto punto); vivo en Brasil, país poseedor de más del 60% del Amazonas; y estoy haciendo todo lo posible por no seguir contribuyendo al calentamiento global.

Aquí en Brasil se habla de desmatamiento o deforestación, en portugués. Han salido infinidad de artículos, reportajes, documentales, propaganda, etc., respecto al tema de la floresta amazónica y ¿creen que la deforestación ha acabado porque un puñado de periodistas y activistas protesten en pro de la conservación? La respuesta es: no. Pero sí puedo afirmar que gracias a esos cientos de miles de personas ha habido un cambio de actitud hacia la naturaleza. El gobierno de Lula está haciendo algunas pequeñas reformas para liberar a la selva de tanto caos; pero es sólo eso, pequeños avances que no van a revertir el efecto de más 20 años de destrucción desmedida.


Un patrimonio importantísimo de la humanidad (y de todo ser viviente) está en riesgo. Apenas en las últimas dos décadas, el Amazonas (la parte brasileña) perdió cerca de 360.000 km2. Si el ritmo de la destrucción continúa, los científicos estiman que para el próximo siglo este bosque tan hermoso no será más que una gigantesca sabana, con profundas consecuencias no sólo para el país, sino para toda América del Sur y el mundo entero.

Cuando uno viaja en carretera por Brasil, uno se da cuenta de la inmensidad de esta tierra, en comparación con otras en América Latina. También se puede percibir la gran cantidad de bosques tropical que viste a los brasileños desde el norte hasta el sur. Ningún otro lugar en el Planeta reúne tantos recursos naturales como el Amazonas. Trillones y trillones de dólares – al año – salen de la explotación de la selva; es un potencial inmenso en recursos minerales, en madera y en servicios ambientales prestados. Sin contar, además, de la cantidad de tierra fértil para la siembra de agro combustibles y alimento para bovinos. Sí, para bovinos, no para seres humanos.





El video es de la ONG Greenpeace. Como estoy en Brasil, el mismo está en portugués, pero si prentan atención es fácil de entender.

Así como yo hay muchas personas que se preocupan por la naturaleza y su preservación, por lo tanto no soy la primera ni seré la última (espero) en escribir al respecto. En estos días, un amigo me envió el link de un hermoso proyecto, con imágenes increíbles y un mensaje poderoso. HOME es el nombre del deseo de muchos de nosotros para revertir la destrucción e invertir en lo que es verde y en lo que tiene vida.


Los invito a preservar, y a una próxima entrega de Amazonas: HELP!



miércoles, 1 de julio de 2009

40 grandes mentiras de la historia



Algunas veces la historia se equivoca, tanto en fechas como en nombres y hechos. Mientras escribía sobre los villanos (mi anterior entrada) y buscaba información sobre ese tema, me encontré con una página web en donde salen escritas 40 grandes mentiras de la historia. Yo solamente voy a mostrar las primeras 10. Si tienen curiosidad de conocer cuáles son las otras 30, pues visiten el site que, por cierto, está en portugués.


1. Osama Bin Laden no fue el primero en atacar a Estados Unidos en territorio norteamericano. Fue, en realidad, Pancho Villa quien en 1916 cruzó el Río Grande y mató a siete personas en la ciudad de Columbus, Texas.



2. ¿Recuerdan cuando em clase de historia nos hablaron sobre las tres carabelas de Cristóbal Colón? Pues, en realidad eran sólo dos carabelas, la Pinta y la Niña. La tercera embarcación no era precisamente una carabela, sino un navío de mayores proporciones llamado María Galante, pero Colón la rebautizó como Santa María.

3. Las terribles y feas Brujas de Salem no fueron quemadas como nos hicieron creer. Tampoco fueron indultadas y dejadas en libertad porque, eran malvadas y brujas. El hecho es que la máxima pena, que las comunidades protestantes dictaban, era que estas mujeres del demonio fueran ahorcadas.



4. Dicen que lo mejor viene em frasco pequeño (y también el veneno). Por eso la fama de Napoleón Bonaparte, pues se creía que era un pigmeo de metro y medio. La verdad es que Napoleón no era tan bajito, pues medía 1.68 cm lo cual, para la época, era una estatura más que aceptable. Dicen que su archi-enemigo británico, el Duque de Wellington, medía 4 cm menos.



5. En “Casablanca” (una película que empecé a ver pero nunca terminé, ya que es muy larga), Bogart nunca pronuncia la frase: "Toque otra vez, Sam". En realidad, la frase exacta es: "Toque Sam, toque 'As time goes by' ". La cuestión es que el actor que hacía el papel de Sam no sabía tocar el piano, sólo sabía cantar. La música de piano fue incorporada en estudio.



6. Los vikingos, esos terribles y sangrientos escandinavos que aterrorizaron gran parte de Europa entre los siglos VI y XI, no eran tan terribles como nosotros los imaginamos, y tampoco usaban cascos con cachos de toro que los hacían parecer demonios nórdicos. Esa fue una creación del pintor sueco Gustav Malstrom en las ilustraciones que realizó en 1820 para el poema épico Frithiof´s Saga. El propósito del artista era, precisamente, retratar a los vikingos como fieros guerreros. Y vaya que lo logró.

7. La llamada Guerra de los Cien Años, duró dieciséis años más (116 años), desde 1337 hasta 1453, año en que los reyes de Inglaterra y Francia (países en conflicto) pusieron fin a la ofensiva.

8. En Boston (Estados Unidos) existió un asesino llamado Albert de Salvo, apodado el estrangulador de Boston. Según la historia, ese hombre mató de esa forma a una persona solamente; las otras doce víctimas fueron asesinadas a golpes.


9. Nos han hecho creer que George Washington fue el primer presidente de Estado Unidos. MENTIRA. Nueve personas fueron presidentes antes que Washington. No fue sino hasta 1789, año en que fue aprobada la constitución norteamericana, que fue celebrado el primer sufragio para el cargo de presidente, y en el cual George Washington ganó.


10. Todos conocemos a Walt Disney por su genio artístico como dibujante, y por haber diseñado el los sueños de todos los niños del mundo. Súper cursi ¿no? En realidad – aparte de la cursilería – Disney nunca fue diseñador y no dibujó ninguno de sus personajes. Ub Wickers fue la mente brillante que creó al ratón Mickey Mouse (entre otros) y dejó que Disney compartiera la autoría, para devolverle un favor.






Para darles una idea de las mentirillas que están a seguir, en la posición 14 se encuentra la guillotina que no es un invento francés, pero quien la popularizó (Ignace Guillotin) murió, irónicamente, ejecutado en la guillonita. Bruce Lee (posición 18), aunque no murió ejecutado, tampoco es El Rey del Karate, pues nunca practicó esa modalidad de las artes marciales.


Navegando hacia la pocisión 24 se escuentra Marco Polo quien no introdujo los fideos a Europa, sino lo moros 600 años antes del nacimiento del viajero italiano. "Si Maoma no va a la montaña, la montaña va hacia Maoma", y hacia la posición 33 pues no es un proverbio árabe, ni pertenece a ningún texto sagrado islámico.



Si quieren conocer la mentira 40, entonces visiten http://www.acidezmental.com/. Recuerden que está en portugués.

lunes, 29 de junio de 2009

La verdad sobre los villanos


Siempre es el héroe el que se lleva la primera página de los periódicos, las ovaciones y el amor de la gente. ¿Pero qué hay con los villanos que hacen todo el trabajo sucio? Ellos (los malos) que siempre están en segundo plano, viendo como el héroe se lleva todo el crédito. Pues a la mayoría de las personas (me incluyo) nos ha gustado los finales rosa en donde todos son felices para siempre, el bueno se queda con la chica linda de la película y el malo queda desterrado para siempre.
La historia ha sido (desde que tengo conocimiento) escrita por los victoriosos y triunfantes. Sin embargo, no olvidemos que algunos “chicos malos” también hicieron historia y colocaron su nombre en el mundo. La historia no sólo pertenece a los valientes héroes, pero también a los que son/están moralmente incorrectos. Casi siempre citamos a aquellas personas que, de forma conveniente, dividen todo en blanco y negro, bueno y malo, como en las películas de vaqueros. Aquellos que gustan de las tonalidades grises, que tienden hacia una moral relativa, la mayoría de las veces quedan atrás del telón.

Por ejemplo tenemos a Gavrilo Princip, un estudiante serbio de 19 años quien asesinó al Archiduque Francisco Fernando en Sarajevo en 1914. Esta acción fue el detonante que dio inicio a la Primera Guerra Mundial, la cual se desarrollo y culminó con el Tratado de Versalles, el cual enfureció al austríaco que hoy conocemos como Adolfo Hitler, quien en respuesta inició la terriblemente sangrienta Segunda Guerra Mundial, la cual dio paso al Tratado de Yalta que, a su vez, dividió al Este de Europa de una manera tan increíble que otro serbio con el nombre de Slobodan Milosevic llegó con la idea de limpiar – étnicamente – a Kosovo. Entonces, de una u otra forma este joven, sin darse cuenta, sin querer queriendo, hizo historia. Gavrilo Princip encendió el siglo XX.


Algunas veces los “chicos malos” no son realmente malos, sino que sus acciones son malinterpretadas o fueron realizadas en el momento y lugar equivocado. Un amigo me dijo que casi siempre cuando una persona defiende sus creencias o lucha por sus ideales suele ser antagonizada, y aquel individuo que es apático, indispuesto y muchas veces sometido, se lleva todo el crédito de la nada.

Quizá Timothy Leary (quien popularizó la droga alucinógena LSD) no era un mal ciudadano que atentó contra la salud mental y psicológica de los adolescentes de los años 60s y 70s. Leary fue un hombre que defendió el poder liberador de los alucinógenos y mantuvo su creencia sobre la paz y la vida en armonía. Que algunos ciudadanos conservadores de Estados Unidos lo hayan visto como una amenaza nacional, es otra historia.
Otro arquetipo de maldad fue Alphonse Gabriele Capone, mejor conocido como Al Capone. Él fue REALMENTE malvado. Este famoso villano fue quien inició la guerra entre familias de la mafia en Estados Unidos. Capone fue un asesino, evasor de impuestos, timador; siempre viviendo al margen de la ley. Sin embargo, no tuvo una vida muy fácil, siendo hijo de inmigrantes en un país desconocido, con siete hermanos a quienes proteger. Seguramente la vida no fue muy fácil para Al Capone en sus años de pavo, y eso influyó mucho a la formación de su criminal y mafiosa personalidad. Todo en la vida pasa por una razón. El ser humano no nace malo ni bueno, sólo nace. Lo que determina si seremos buenas o malas personas son las circunstancias de la vida.


Apuesto a que la Bruja del Oeste del “Mago de Oz” fue una niña solitaria maltratada por sus padres; o que el desquiciado archi-enemigo de Batman, el Guasón, fue un niño que vivía con un padre alcohólico y abusador; tal vez Darth Vader es una buena persona pero que tomó malas decisiones que lo condenaron para siempre al lado oscuro de la fuerza. La chica de la película “El Exorcista” era una niña normal, dulce y feliz, sólo que el diablo (demonio, coco, Lucifer, Satán, Belcebú, llámenlo como quieran) se apoderó de ella y la hizo ver muy mala, y MUY fea.

Así que debemos admitir que los malos fueron, son y siempre serán muy importantes en nuestras vidas, ya sea en ficción o en la vida real. Ellos, los villanos, son quienes dan emoción a todo lo que nos rodea. ¿Cómo se hubieran conocido Blancanieves y su Príncipe Azul si no fuera por la manzana envenenada de la madrastra? O ¿cómo serían héroes Batman o Superman sin el Acertijo o Lex Luthor?


Cada héroe necesita un antihéroe. Cada Hitler necesita de un Roosevelt o un Churchill. Cada Dios necesita de su Diablo. A veces la vida, las circunstancias, las malas decisiones y los malos consejos llevan a muchos ídolos a convertirse en un infame personaje. Y si Gavrilo Princip tuvo la mala suerte de cambiar al siglo XX ¿quién será el próximo “villano” que cambie el siglo XXI? No se sabe. Habrá que esperar a ver qué pasa. Como dijo la escritora norteamericana Jessica Hagedorn “La vida no es simple, y el hombre no debe ser etiquetado ya sea como héroe o como villano”.


viernes, 26 de junio de 2009

La profesión más antigua celebra su día en Venezuela




El título no tiene NADA que ver con lo que ustedes están pensando. De hecho, es una profesión que no incluye el cuerpo tanto como la mente, y la satisfacción que se siente es un orgasmo, pero intelectual. El periodismo es una carrera hermosa, llena de riesgos y muchísima emoción. Este 27 de junio se celebra el Día del Periodista Venezolano, por lo que dedicaré unas palabras a todos esos amigos y colega que en su día a día llevan la información a los hogares venezolanos, no sólo en el país, sino en el mundo entero. No escribiré sobre los varios golpes que ha recibido el periodismo venezolano en estos últimos años. Tampoco escribiré sobre la situación de Globovisíon o Radio Caracas. Este es un escrito más que noticioso, entretenido.


Para mí, el periodismo es la lucha constante por la búsqueda de la información precisa, lo más veraz posible y manejando la subjetividad de la mejor forma. Nuestros antepasados (cavernícolas) ya practicaban el arte de reportaje y prensa. ¿O cómo creen ustedes que se comunicaban? ¿Es que acaso los dibujos rupestres de Altamira fueron hecho por mera diversión? No. El hombre de las cavernas también documentó lo que sucedía. El cavernícola era un comunicador social. Por lo tanto SÍ es la profesión más antigua del mundo, no la que se supone que debería ser la más arcaica… Ya saben a cual me refiero.


No obstante, hablando un poco serio, el periodismo se hace popular a partir de la segunda mitad del siglo XIX, ya que las guerras y las nuevas innovaciones en la tecnología como el telégrafo, la luz eléctrica, el radio, la fotografía, entre muchas otras cosas, dieronel periodismo nuevas herramientas para realizar el trabajo con muchas más habilidad y competencia.


















Dibujo derecha: uno de los primero periódicos de Estados Unidos. Siglo XIX
Dibujo izquierda: caricatura de periódico del siglo XVII


El siglo XX trae nuevos retos para el periodista de la época, como por ejemplo la Primera y Segunda Guerra Mundial, el lanzamiento de la primera nave espacial, el primer hombre en la luna, la Guerra de Vietnam; así como los Juegos Olímpicos, el Mundial de Fútbol, nuevos descubrimientos científicos, el nacimiento de nuevas tendencias en la moda y la música. En fin, innúmeros acontecimientos dieron a los comunicadores sociales mucha tela que cortar.


Hoy en día, en el siglo XXI los periodistas tenemos retos que van más allá de la información y la noticia. Tenemos la responsabilidad de enseñar, de entretener y darle dinamismo a la carrera que tanto nos gusta. No en balde, han salidos programas interesantes en donde podemos interactuar con nuestros lectores, donde ellos también pueden ser parte de la noticia.













Todo la tecnología que el periodista puede utilizar,
y así convertirse en todo un héroe nacional...


... así como Clark Kent

¿Cuál es el reto del periodista venezolano? Considero que es necesario darle a la gente algo más que una simple noticia o una mera entrevista. Es preciso no sólo saber qué sucede dentro de las cúpulas del gobierno o de qué se trata la mini-histeria de los ministerios, pero conocer a fondo el pensamiento del venezolano: lo que siente, por qué lo siente, qué le preocupa, qué le gustaría y por qué. Así como es importante preguntarse ¿cómo está Venezuela?, creo que es igual de importante averiguar ¿cómo está el venezolano?


Como un periodista resperado, me rehúso a revelar mis fuentes



Alo, policia? Tengo a un ciber-disidente en frente mío!





A todos mis colegas y amigos del gremio periodístico aquí en Brasil, en México, en Estados Unidos o en Europa les deseo el mejor Día del Periodista Venezolano. Ya saben que pa´ adelante es pa ´ allá.

martes, 23 de junio de 2009

Entrevista con Mafalda

Sus comentarios y ocurrencias son el espejo de las inquietudes sociales y políticas de los ´60. Hija de una típica familia de la clase media argentina, Mafalda representa el inconformismo de la humanidad, pero con fe en su generación y visto desde la mirada de una niña de 6 años. Sus odios más fuertes abarcan la injusticia, la guerra, las armas nucleares, el racismo, las absurdas conversaciones de adultos y, por supuesto, la terrible sopa. Entre sus pasiones figuran Los Beatles, la paz, la libertad, los derechos humanos y la democracia.



Vero: Hola Mafalda. Bienvenida a mi blog. ¿Cómo estás?
Mafalda: Yo bien, gracias por la invitación. ¿Y vos cómo estás?

V: Chévere. Pues bien, Mafalda. Tengo entendido que eres una persona preocupada por la paz y la libertad. ¿A qué se viene tanta ansiedad?
M: Mirá, me siento preocupada porque la paz se está tardando mucho en llegar. Es que la guerra no la deja, por eso el retraso. Y respecto de la libertad, pienso que es demasiado pequeña y frágil para imponerse en el mundo.


V: Ya que haces mención del mundo ¿Cuál es tu visión del mismo?
M: Yo creo que en el mundo de hoy cada quien tiene su pequeña o gran preocupación. Es decir, somos muy individualistas y no pensamos como un colectivo. Y resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno.



V: ¿Crees que los seres humanos son el cáncer del planeta?
M: Vos imaginá este ejemplo. Siempre he escuchado en mis clases de geografía que el Amazonas es el pulmón natural de nuestro Planeta, pero eso no ha parado a las personas a que continúen destruyendo ese bosque. Es como si vos tuvieras cáncer de pulmón, y vos no hicieras nada para prevenirlo, y mucho menos para curarlo. Entonces si hay mucha gente preocupada por el Amazonas ¿por qué no piden a las Naciones Unidas para que lo compre y proteja? Pero no. Los seres humanos son así. Siguen fumando a pesar de la enfermedad.


V: ¿Por qué odias la sopa?
M: Te voy a responder de esta forma. La sopa es a la niñez como el comunismo es a la democracia.


V: ¿Qué quieres ser cuando seas grande?
M: Cuando sea grande quiero trabajar como intérprete en las Naciones Unidas, y cuando un delegado le diga a otro que su país es un asco, yo voy a traducir que su país es un encanto y, claro, nadie podrá pelearse ¡Y se acabarán los líos, y las guerras, y el mundo estará a salvo!




V: ¿Unas últimas palabras que quieras decir a los lectores del blog?
M: ¡Sí! Pero ¿lo puedo decir como si fuera la presidenta de la República Argentina, Mafalda? (Risas)


V: Si, por supuesto que puedes.
M: ¡Excelente! Aquí voy ¡Desde esta humilde sillita formulo un emotivo llamado a la paz mundial! ¡El que no me siga tendrá como castigo un plato de sopa! (Risas) ¿Vite? Me quedó re bueno, es que la sopa es mi arma secreta (risas).

lunes, 22 de junio de 2009

4 mundos en 1

Fotografía: www.undp.org

¿Quién iba a pensar que en nuestro mundo existieran 4 mundos? Como si ya no fuese suficiente con el que tenemos. Parece el tema de un capítulo de Dimensión Desconocida, pero no es así. Yo nunca lo pensé hasta que me puse averiguar sobre el significado del término “tercer mundo” el cual, con el pasar de las décadas, ha sido tergiversado, representando algo un poco diferente a su definición original.


Es en L´Observateur – del 14 de agosto de 1952 – donde Alfred Sauvy define que los países del “tercer mundo” son aquellos que no se encontraban alineados con la OTAN (“primer mundo”), ni con los Estados signatarios del Pacto de Varsovia (“segundo mundo”). Vale acotar que durante la Guerra Fría las naciones del “tercer mundo” conformaron el Movimiento de Países No Alineados o MPNA, pues querían mantener su neutralidad en el conflicto ideológico entre la Unión Soviética y Estados Unidos.


Para salir de dudas y dejar las cuentas claras quise hablar con un experto. Entonces, me dirigí a la Universidad Federal de Paraná (UFPR) y conversé con el jefe del departamento de Ciencias Políticas de esa casa de estudio, Federico Rezt, sobre esta definición de los mundos. Rezt me comentó que “la diferencia entre países del ‘primer mundo y segundo mundo’ es que los primeros conformaban gobierno de derecha o democracias con esa dirección; mientras que los segundos eran gobiernos de izquierda o socialistas/comunistas que, en su mayoría, eran fuertemente influenciados por Unión Soviética”.


Fotografía: www.nato.int

De acuerdo con Rezt, y la historia universal, hubo un pequeño grupo de países que no aspiró tomar partido si quiera en el MPNA. Este equipo al que yo llamo “ni, ni, ni” estuvo conformado por Finlandia, Irlanda, Suecia, Suiza, entre otros. Y entiendo por qué esos gobiernos lo hicieron: nada más pensar en tener, aunque fuere, una minúscula controversia con tres mundos iba a ser demasiada presión, sobre todo en ese preciso periodo de la historia donde la Guerra Fría ya era algo bastante delicado y polémico.


Con el pasar del tiempo los términos de primero, segundo y tercer mundo fueron aglomerando a sus miembros de acuerdo con su desarrollo económico, social y político; la ideología, de una u otra forma, pasó a un segundo plano, y la industrialización fue la protagonista en esta complicación de mundos. Hoy en día los países del “primer mundo” son los desarrollados, los del “segundo mundo” son los que están en vías de desarrollo, y los del “tercer mundo” son los subdesarrollados.


Es obvio que a medida de que pasan las décadas existen más innovaciones en tecnología y educación, por esa razón los países pueden cambiar de estatus. Lo que sucede es que esa mudanza no es sólo para los Estados en desarrollo o los subdesarrollados, sino también para las economías industrializadas del “primer mundo”. Es decir, mientras Estados Unidos, Japón e Inglaterra avanzan a pasos agigantados, países como Venezuela, Brasil y Suráfrica tienen un progreso muy pequeño, en comparación. Parece que llegar al pedestal de los primeros es una tarea casi imposible, por no decir que lo es del todo.


Ciertamente la distribución de la riqueza entre “los mundos” es cuestionable, y es una de las razones de la desigualdad tan grande que existe – por ejemplo entre Costa Rica y Haití. A este tenor, la corrupción, la injusticia, las guerras civiles y el total irrespeto a los derechos humanos influyen en el atraso de una nación. Por lo tanto aquellos países que sufren de esos “síntomas” mencionados anteriormente, y que además se encuentran en estado de absoluta precariedad, cuyos ciudadanos viven en extrema pobreza o en riesgo social constante entran en el novísimo término de “cuarto mundo”.


En total hay 34 países pertenecientes a esta nueva categoría mundial, la mayoría se encuentra en África, mientras que desde América está Haití para representarnos en la tristeza y desolación del “cuarto mundo”.

Fotografía: www.amnesty.org

Aunque es relativamente una nueva denominación, esta (la de “cuarto mundo”) nace en los años 70 no para encasillar a países, sino a personas dentro de una comunidad cualquiera. Si buscan por una definición más exacta, esta podría ser: “(…) es un pueblo formado por hombres, mujeres y niños que, generación tras generación, se ven excluidos de los derechos fundamentales que goza el resto de la sociedad. (…) No se cuenta con ellos como interlocutores sino como meros beneficiarios de ayuda”.

La mayoría de los ciudadanos de los países pertenecientes al “cuarto mundo”, viven (o tratan de sobrevivir) en la línea de pobreza de 1 dólar al día. Ciertamente en los países en vías de desarrollo como Brasil hay mucha pobreza, pero no se compara a la existente en Haití o en la mayoría de las naciones africanas, por ejemplo. Para erradicar esta situación tan extrema el Programa de Las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), junto con otros organismos de la ONU, conformó el proyecto de las Metas del Milenio de las Naciones Unidas (MDG, por sus siglas en inglés). Uno de sus principales propósitos "(...) es reducir a la mitad la tasa de pobreza de 1990 hasta el año 2015, llevando en cuenta la línea de pobreza de 1 dólar al día".

Fotografía: www.un.org/es


Ya nos encontramos a las puertas del año 2015 y las Metas del Milenio no se han cumplido; el “cuarto mundo” sigue creciendo, así como la disparidad entre los otros tres mundos. Toda esta situación se dilata aun más con la actual crisis mundial que no es únicamente económica, también es ambiental, social y cultural. ¿Qué nos queda por hacer? Seguir luchando, trabajar muy duro y apoyar a todas esas instituciones que, como nosotros, quieren cambiar el mundo para mejor.

Aun hay un largo trecho por recorrer, y cuatro mundos que visitar. Como dijo el Secretario General de Las Naciones Unidas, Ban Ki-moon: “(…) esto requiere de un esfuerzo inquebrantable, colectivo y de largo plazo.”